Y también Gaelle

El 12 de Enero del 2010 la tierra sacudió Haití con un terremoto de 7 grados de magnitud, convirtiendo al país más pobre de América en escombros. El epicentro del seísmo, situado a escasos quince kilómetros de la capital Puerto Príncipe, se cobró trescientas dieciséis mil vidas y es considerado una de las catástrofes humanitarias más graves de la historia. De inmediato brigadas de salvamento de todo el mundo se desplazaron hasta la isla para tratar de rescatar a los ciudadanos atrapados bajo las ruinas en una lucha contrarreloj. Un equipo de bomberos de Castilla y León, acompañados del perro de rescate “Turco”, acudieron a la llamada de auxilio y protagonizaron uno de los rescates más mediáticos: el pequeño Redji, de dos años, fue desenterrado cuarenta y ocho horas después del seísmo, convirtiéndose así en un símbolo para la esperanza. A pesar de este éxito los héroes vuelven traumatizados: tenían que abandonar a una chica que se llamaba Gaelle. Un año después de la tragedia, cuando parece que el mundo ya se ha olvidado de la pequeña isla, tres bomberos españoles deciden finalmente regresar a Haití para llevar ayuda humanitaria, buscar a Redji e intentar a superar el trauma.