“La clave está en acertar con la personalidad”
Pepe Reyes llena de moda española la 30 edición de los Goya
Desde muy pequeño fue atrapado por el mundo de la imagen. El estilista Pepe Reyes confiesa que en su infancia “mi refugio era ir a los cines de Zafra y seguir series y películas en televisión” y que comenzó a dibujar vestidos para sus héroes de la pantalla: de Mazinger Z a Joan Collins o la princesa Leia. Estudió Diseño y Moda en la Alta Escuela de Moda Italiana, se formó en Diseño Teatral, Cine y Televisión, y en Diseño de Vestuario y Atrezzo para Teatro, y comenzó a trabajar en una cadena de televisión. Sus primeros pasos en el cine fueron con Sonia Grande (Hable con ella y Sin noticias de Dios) y con el nominado al Oscar Paco Delgado (La mala educación y Crimen ferpecto), y terminó formando su propia empresa con Natacha Fernández: Lookart. Sus creaciones han llenado las series de TV La señora, Isabel, Carlos. Rey Emperador; las películas Enloquecidas, de Juan Luis Iborra; La isla interior, Los años desnudos y Descongélate, de “mis queridos” Dunia Ayaso y Félix Sabroso, y La corona partida, de Jordi Frades, próxima a estrenarse y protagonizada por Irene Escolar, Ursula Corberó, Rodolfo Sancho y Raúl Mérida. Este año el vestuario de la 30 edición de los Premios Goya está en sus manos.
Por Juan MG Morán y Mónica Tourón
¿Supone cierto respiro, cierto descanso embarcarse en un proyecto como el estilismo de los Goya, que está casi en las antípodas de sus últimos trabajos?
Por completo. Ahora vuelvo del Renacimiento con Carlos. Rey Emperador y, sin lugar a dudas, ser el estilista de los Goya es como una especie de respiro, aunque evidentemente ha tenido sus complicaciones, porque no hay enemigo pequeño. Desde el momento en que no tienes que crear tú hasta la última puntada es completamente distinto. Reencontrarme con showrooms, diseñadores y estilistas es volver a mis inicios. En mi trabajo hago normalmente época, pero no quiero perderme lo que se hace tanto en pasarelas nacionales como internacionales, o de dónde vienen las fuentes.
Sigo las tendencias, pero intento mirarlas con cierta perspectiva y lejanía. A veces quiero modernizar el vestuario de época y otras no quiero que haya influencia y hacer algo más fiel. Me ayuda todo: colecciones de Galliano para Dior, donde han aparecido cuchilladas del siglo XVI; unos vestidos de novia de clara inspiración de la época de Isabel de Lagerfeld para Chanel, Dell’acqua, Zac Posen, Ralph & Russo…
¿Qué resulta más complejo? ¿Vestir a un personaje o vestir a una persona e intentar conciliar su imagen con sus gustos…?
Es distinto y a la vez muy similar. Cuando tienes acceso a tanta información, o a poder contar con tantos diseñadores y lo que han presentado o presentarán en las siguientes temporadas, creo que por un lado es buenísimo y por otro también despliega y se ramifica demasiado. El intentar llevar una línea elegante en la gala, que haya cierta sutileza, es complicado porque hablamos de muchas fisonomías, diferentes edades y estilos… Se trata de acertar con la personalidad. Por mucho que sepas y entiendas de cortes que van perfectos para cada fisonomía, hay otra cosa que es la creación con psicología. Lo ideal es que los actores no pierdan su esencia. Para mí es lo mismo que vestir a un personaje de una película, me lo tomo de la misma manera.
30 aniversario de los Goya, una edición importante… ¿Qué veremos en la alfombra roja?
El showroom que hemos puesto en marcha ha atraído a muchos de los que pisarán la alfombra roja y entregarán premios. Nuestra intención ha sido mostrar que en la moda española hay creadores que son auténticos genios. Ya que es la fiesta del cine español veremos mucha moda española. Mi deseo es que, desde la primera persona que pase por la alfombra hasta el último momento de la ceremonia, veamos elegancia a raudales.
¿Percibe cierta evolución en cuanto a moda se refiere en los Premios Goya?
Sí. He hecho una especie de seguimiento para ponerme un poco al día de los últimos años, y ya el año pasado noté una presencia muy potente de diseñadores españoles. Hay una evolución muy positiva y muy hermosa. Me gusta que los chicos, dentro de la elegancia y la versatilidad que puede tener un esmoquin, vayan arriesgando un poco más y se atrevan con texturas y colores. Este año contamos con la sastrería de Scalpers, Lucas Balboa, Protocolo, Sagaz y DR&N. Incluso alguno de ellos se han atrevido con tejidos brocados y gamas que se salen un poco del clásico negro.
Durante algunas décadas Balenciaga, Pertegaz, Elio Bernhayer eran nombres muy tenidos en cuenta en el panorama internacional. ¿Hay relevo? ¿Cómo ve el panorama actual de diseñadores españoles?
Me vienen a la cabeza Del Pozo, Etxebarría, Alvarno, Marcos Luengo, Inuñez… Y sí, hay grandes potenciales, la pena es que a veces se quedan como futuras promesas. Hay jóvenes creadores que apuntan maneras que son fantásticas. Trabajo mucho con casas de costura para hacer vestuario de época, y me he dado cuenta de que, aunque desconocidos, hay verdaderos genios de la aguja.
Hay mucha heterogeneidad: David Delfín, Jorge Vázquez…
Ahora en España podemos ver todo tipo de propuestas en moda, y de eso evidentemente nos vamos a valer. Las tendencias ya no nos vienen tan dictadas desde fuera… Hay una gran libertad y enorme expansión; siempre después de grandes crisis la creatividad y la libertad vuelven remontar.
Como cómplice en esta aventura tendrá a la moda española. ¿Cree que hay que hacer un alegato para que nuestros actores y actrices se atrevan más con los creadores nacionales?
Totalmente. Me encantaría que nuestras grandes actrices y actores luciesen más moda española, y seguramente así aumentasen su confianza en ella. Este año, al adelantarse las nominaciones, hemos jugado con más tiempo de reacción y hemos entrado en contacto con más de cien fantásticos diseñadores, como Roberto Verino, Ángel Schlesser, Cortana, Pedro del Hierro, Juana Martín, Antonio García o Vicky Martín Berrocal… Les hemos contado lo que nos gustaría y eso ha hecho posible tener muy claro lo que podría encajar.
Veo que siempre tiene un momento para hablar de su equipo. ¿Hasta qué punto es importante estar bien rodeado, formar al que está a su lado, traspasar a otro todo lo que ha aprendido…?
Si somos buenos jefes es porque nos rodeamos de maravillosos equipos. Si yo puedo estar creando sin presiones es porque tengo un equipo que me respalda, me está llevando el plató, viene de exteriores. En Lookart hemos ido formando a nuestros profesionales, y esto yo lo relaciono mucho con la fidelidad. Cuando un equipo te es fiel, hay una especie de “ten con ten”. Estamos aquí para enseñar, y creo que es fundamental que haya relevos, contagiarles la pasión de hacer.
El próximo sábado, un centenar de personas entre nominados, entregadores, cuerpo de baile y actores que intervienen en el número musical de apertura vestidos por Pepe Reyes; más de cien diseñadores de moda españoles; zapatos de Martinelli, Mascaró, Cuplé y Miss García, y joyas de Carrera y Carrera estarán presentes en los Premios Goya. Las mejores galas para celebrar los 30 años de la gran noche del cine español.